En la inmensidad de la estepa patagónica, donde el viento susurra historias milenarias y el horizonte se pierde entre mesetas y cañadones, se encuentra la Estancia La María, un rincón mágico en el noroeste de Santa Cruz que guarda uno de los tesoros arqueológicos más fascinantes de Argentina. A solo 30 km al sur de Gobernador Gregores, esta estancia privada combina la autenticidad de la vida rural patagónica con un yacimiento de arte rupestre de valor incalculable, donde pinturas de hasta 10.000 años de antigüedad narran la vida y la cosmovisión de los primeros habitantes de la región. Visitar la Estancia La María es embarcarse en un viaje al pasado, rodeado de paisajes vírgenes, silencio profundo y una conexión íntima con la historia y la naturaleza de la Patagonia.

Ubicación: Un Rincón Remoto en la Estepa Patagónica
La Estancia La María se sitúa en una zona de transición entre la árida estepa patagónica y las estribaciones precordilleranas, a 30 km de Gobernador Gregores y 160 km de Perito Moreno, en el noroeste de Santa Cruz. El acceso se realiza por un camino de ripio desde la Ruta Provincial 25, que serpentea entre mesetas basálticas, cañadones erosionados y formaciones rocosas que parecen esculpidas por el viento. Esta ubicación aislada, lejos de las rutas turísticas tradicionales, ha permitido que el sitio se conserve en un estado casi prístino, ofreciendo una experiencia auténtica para quienes buscan destinos fuera de lo común.
Cómo Llegar
- Por tierra: Desde Gobernador Gregores, toma la Ruta Provincial 25 hacia el sur (30 km, aproximadamente 40 minutos en auto). El camino es de ripio, por lo que se recomienda un vehículo 4×4 o con buena tracción, especialmente en invierno o tras lluvias. Desde Perito Moreno, el trayecto es de unos 160 km (2,5 horas) por la Ruta Nacional 40 y la Provincial 25.
- Desde otros destinos: Desde El Calafate (400 km, 6 horas) o Río Gallegos (600 km, 9 horas), combina la Ruta 40 con tramos de ripio. Alquilar un auto es la mejor opción para flexibilidad, aunque hay servicios de transfers privados desde Gobernador Gregores.
- Aeropuerto más cercano: El Aeropuerto de Perito Moreno (160 km) recibe vuelos regionales desde Comodoro Rivadavia o Río Gallegos, pero la mayoría de los viajeros llegan vía Aeropuerto Internacional de El Calafate y combinan con transporte terrestre.
- Recomendación: Consulta el estado del camino con la estancia o la oficina de turismo de Gobernador Gregores, ya que las condiciones pueden variar por lluvias o nieve.
La lejanía de La María es parte de su encanto, invitando a los visitantes a desconectarse del bullicio y sumergirse en la inmensidad de la Patagonia.
Un Patrimonio Arqueológico Excepcional: Las Pinturas Rupestres
El corazón de la Estancia La María es su yacimiento de arte rupestre, descubierto en 1973 y considerado uno de los más importantes de Argentina, comparable en relevancia a la Cueva de las Manos (a 130 km, también en Santa Cruz). Este sitio, declarado de interés cultural y científico por instituciones como el CONICET, la Universidad de Buenos Aires y organismos internacionales, ofrece una ventana directa a la vida de los pueblos originarios que habitaron la región hace entre 6.000 y 10.000 años, probablemente antecesores de los Aonikenk (tehuelches meridionales).
Características del Yacimiento
- Más de 100 paneles rupestres: Las pinturas, distribuidas en aleros y paredes rocosas protegidas del viento y el sol, están excepcionalmente conservadas gracias al clima seco de la estepa.
- Estilo artístico: Similar al de la Cueva de las Manos, pertenece al estilo estepario de manos y guanacos, caracterizado por representaciones de manos en negativo (creadas soplando pigmento alrededor de la mano) y positivo (impresas directamente), junto con figuras de guanacos, escenas de caza, formas geométricas y motivos abstractos.
- Pigmentos naturales: Los colores predominantes son rojo (óxido de hierro), ocre, negro (carbón vegetal) y blanco (calcita o yeso), aplicados con técnicas que han resistido milenios.
- Significado cultural: Las pinturas reflejan la cosmovisión, las prácticas de caza y los rituales de los antiguos habitantes, quienes usaban los cañadones como refugios y puntos de observación en la estepa.
- Entorno geológico: Los aleros, formados por la erosión de rocas sedimentarias del Cretácico Superior, crean un escenario natural que enmarca las obras como un museo al aire libre.
Estudios arqueológicos sugieren que el sitio fue un lugar de encuentro y expresión cultural durante milenios, con superposiciones de dibujos que indican una ocupación prolongada. A diferencia de la Cueva de las Manos, La María recibe menos visitantes, lo que permite una experiencia más íntima y contemplativa.
Experiencia Turística: Un Viaje al Pasado en una Estancia Viva
La Estancia La María no es solo un sitio arqueológico; es una estancia rural en actividad, dedicada a la producción ovina y bovina, que ha abierto sus puertas al turismo cultural, educativo y científico bajo un modelo de visitas guiadas privadas. Este enfoque de turismo responsable asegura la preservación del yacimiento y el entorno, ofreciendo a los viajeros una experiencia auténtica en el corazón de la Patagonia.
Actividades en la Estancia
- Recorridos guiados al yacimiento rupestre: Las visitas, con reserva previa, son lideradas por guías especializados que combinan conocimientos de arqueología, historia y antropología. Los recorridos, de 2 a 3 horas, exploran los principales aleros, explicando el contexto cultural, las técnicas de pintura y la vida de los pueblos originarios. Los guías también destacan la importancia de la conservación, ya que el sitio es vulnerable al contacto humano.
- Caminatas por cañadones y senderos naturales: La estancia ofrece senderos de baja a moderada dificultad que atraviesan cañadones, mesetas y arroyos temporales. Estas caminatas permiten disfrutar del paisaje estepario, con vistas de las Sierras de San Lorenzo y la posibilidad de avistar guanacos, zorros colorados, pumas (rara vez) y aves como el cóndor andino, el cauquén cabeza gris y el águila mora.
- Experiencias rurales: Participa en actividades tradicionales como el arreo de ovejas, la esquila o la preparación de un asado patagónico. Estas experiencias, guiadas por baqueanos, ofrecen una conexión directa con la vida estanciera.
- Avistaje de fauna y flora: La estepa es hogar de especies adaptadas al clima árido, como la choique (ñandú patagónico), el chinchillón y plantas como el calafate y el neneo. Lleva binoculares y una cámara con zoom para capturar detalles.
- Alojamiento rústico: La estancia ofrece cabañas y refugios con comodidades básicas, ideales para quienes buscan una inmersión total en el entorno. Dormir bajo el cielo estrellado de la Patagonia, con el silencio de la estepa, es una experiencia inolvidable.
- Charlas culturales: Por las noches, se organizan charlas sobre arqueología, la cultura Aonikenk y la conservación del patrimonio. Estas sesiones, a menudo acompañadas de un mate o un fogón, son perfectas para profundizar en la historia de la región.
Turismo Responsable
La Estancia La María prioriza la preservación del yacimiento y el ecosistema. Los visitantes deben seguir reglas estrictas: no tocar las pinturas, no salirse de los senderos marcados y evitar el uso de flashes en fotografía, ya que la luz intensa puede dañar los pigmentos. El número de visitantes por grupo es limitado (generalmente 10-15 personas), asegurando una experiencia personalizada y un impacto mínimo en el sitio.
La Estancia: Un Reflejo de la Vida Patagónica
Fundada a principios del siglo XX, la Estancia La María es un ejemplo vivo de la tradición ganadera patagónica. Sus 250.000 hectáreas abarcan campos abiertos, cañadones y arroyos que alimentan el Río Chico, un afluente del Río Pinturas (donde se encuentra la Cueva de las Manos). La estancia combina su actividad productiva con el turismo, ofreciendo una ventana a la vida rural del noroeste de Santa Cruz.
Los propietarios, descendientes de pioneros patagónicos, trabajan con arqueólogos y guías locales para proteger el yacimiento mientras comparten su riqueza con los visitantes. La hospitalidad patagónica se refleja en cada detalle: desde el mate compartido en el campo hasta los relatos de los baqueanos, que narran historias de la estepa y sus antiguos habitantes.
Conexión con la Cueva de las Manos
La Estancia La María forma parte del mismo corredor arqueológico que la Cueva de las Manos, ubicada a unos 130 km al noreste. Ambos sitios comparten el mismo estilo artístico y período cultural, pero La María ofrece una experiencia más íntima debido a su menor afluencia de turistas. Muchos viajeros combinan ambos destinos en un circuito cultural, visitando La María desde Gobernador Gregores y la Cueva de las Manos desde Perito Moreno o Los Antiguos. Esta ruta, conocida como el Corredor de la Ruta 40, es un viaje a través del tiempo, conectando los sitios rupestres más importantes de la Patagonia.
¿Por Qué Visitar la Estancia La María?
La Estancia La María es un destino que trasciende lo turístico para convertirse en una experiencia transformadora. Visitarla es:
- Un viaje al pasado: Contemplar pinturas rupestres de hasta 10.000 años en su contexto natural, rodeado de cañadones y silencio, es una conexión directa con los primeros habitantes de la Patagonia.
- Una inmersión en la vida rural: Participar en actividades estancieras y compartir con los baqueanos te permite entender la resiliencia y la simplicidad de la vida patagónica.
- Un escape del turismo masivo: La lejanía y el acceso controlado garantizan una experiencia íntima, lejos de las multitudes.
- Un encuentro con la naturaleza: Los paisajes de la estepa, con sus guanacos, cóndores y cielos estrellados, ofrecen una paz que solo la Patagonia puede brindar.
- Un compromiso con la conservación: Apoyar el turismo responsable en La María contribuye a preservar este patrimonio para futuras generaciones.
Consejos Prácticos para tu Visita
- Reserva previa: El acceso es exclusivamente con visitas guiadas privadas, por lo que debes contactar a la estancia con antelación (vía email o teléfono, disponibles en la oficina de turismo de Gobernador Gregores). Las tarifas varían según el tipo de recorrido (aproximadamente USD 20-50 por persona).
- Mejor época: Primavera y verano (octubre a marzo) ofrecen temperaturas más suaves (10°C a 25°C) y días largos. En invierno (junio a agosto), el frío (hasta -10°C) y la nieve pueden dificultar el acceso al camino de ripio.
- Qué llevar:
- Ropa abrigada en capas, incluyendo un cortavientos impermeable y un gorro (el viento patagónico es constante).
- Calzado de trekking con buen agarre para senderos rocosos.
- Gafas de sol y protector solar (la radiación UV es alta en la estepa).
- Botella de agua reutilizable, snacks energéticos y binoculares para avistar fauna.
- Cámara con zoom para capturar detalles de las pinturas sin usar flash.
- Cómo prepararte: El terreno es irregular, con pendientes suaves, por lo que se requiere una condición física básica. Los recorridos no son aptos para personas con movilidad reducida debido a la falta de infraestructura adaptada.
- Sostenibilidad: Respeta las normas del sitio: no toques las pinturas, mantente en los senderos y lleva tu basura. La estancia colabora con programas de conservación arqueológica, y tu visita apoya estos esfuerzos.
- Alojamiento: Además de los refugios en la estancia, puedes hospedarte en Gobernador Gregores (hoteles como Hostería Kaikén o Hotel Parador del Lago) o en estancias cercanas como La Maipú. Reserva con antelación en temporada alta.
- Dato curioso: Las pinturas de La María fueron creadas en un período de cambio climático, cuando la estepa pasó de ser más húmeda a su aridez actual, lo que sugiere que los artistas adaptaron su vida y su arte a un entorno en transformación.
¿Por Qué No Te Lo Puedes Perder?
La Estancia La María es un tesoro escondido que combina la majestuosidad de la Patagonia con la profundidad de su historia milenaria. Pararte frente a las pinturas rupestres, rodeado de cañadones y el silencio de la estepa, es sentir la presencia de los antiguos habitantes que dejaron su huella en la roca. La experiencia se completa con la calidez de la vida estanciera, los relatos de los baqueanos y la oportunidad de explorar un paisaje que parece detenido en el tiempo.
Este destino no está en los circuitos turísticos masivos, y esa es su mayor fortaleza. La María te invita a descubrir la Patagonia profunda, donde la historia, la naturaleza y la cultura se entrelazan en un abrazo eterno. ¡Prepara tu viaje, reserva tu visita y dejate sorprender por este rincón único de Santa Cruz que guarda los secretos del pasado patagónico!